Después de los 40, hay mujeres buscan un entrenamiento práctico para mantenerse flexibles y activas y evitar a toda costa las complicaciones asociadas con el envejecimiento. Hay dos ejercicios simples que puedes realizar cómodamente sentada y que contribuyen a tu agilidad y bienestar.
Mantener una buena flexibilidad no solo es esencial para sentirse bien, sino que también aporta una serie de beneficios para tu cuerpo. Estos incluyen la prevención de molestias y lesiones, la mejora de la postura y la facilitación de las actividades diarias.
Además, incrementa tu capacidad de movimiento y potencia tu rendimiento físico, lo que te permite disfrutar plenamente de todas las actividades diarias. Estos ejercicios están diseñados tanto para mujeres fitness como para principiantes.
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Ejercicio 1: tobillos, piernas y espalda
Siéntate relajada en tu esterilla de yoga favorita, con la espalda recta y las piernas apoyadas en el suelo. Estira tus brazos tratando de alcanzar tus pies. Si es posible, toma la punta de tus pies y realiza movimientos con tus tobillos hacia adelante y hacia atrás durante 30 segundos. Se puede repetir este ejercicio varias veces al día para tener tobillos y piernas fuertes. Además, fortalecerá los músculos de las extremidades y la espalda.
Ejercicio 2: apertura total
Estando sentada, levanta la pierna derecha hacia el pecho, sosteniéndola con una mano en el tobillo y otra en el suelo. Mantén la posición durante 15-20 segundos y luego cambia a la pierna izquierda. Este ejercicio contribuye a la flexibilidad de las piernas y la zona lumbar.
Al incorporar ejercicios de estiramiento simples como estos en tu rutina diaria, podrás experimentar una gran diferencia en tu flexibilidad y, además, te ayudará a lucir fabulosa y disfrutar de un bienestar general. Siempre consulta con un profesional de la salud antes de incorporar nuevos ejercicios en tu rutina.