Uno de los mayores errores que puedes cometer antes de hacer ejercicios en tu día a día es no realizar los estiramientos correspondientes y mucho más sin tu idea es salir a correr o caminar.
La razón es bastante simple, de no hacerlo, puedes exponerte a sufrir lesiones, pues notarás cierta rigidez en las piernas porque simplemente no hiciste el precalentamiento. Ante esta necesidad, te presentamos la rutina que debes empezar a hacer sí o sí de ahora en adelante.
Ejercicios de estiramiento a considerar
- Estiramiento dinámico de isquiotibiales
Antes de hacer tus ejercicios diarios, deberías empezar con un estiramiento dinámico de isquiotibiales que te ayudará a tener un mejor rendimiento en tu carrera o caminata. Esto ayuda a preparar los músculos de la parte posterior del muslo y, a su vez, te dará una mayor flexibilidad y reducirás drásticamente el riesgo de lesiones.
- Elevaciones de rodilla
Uno de los ejercicios más básicos que puedes hacer, simplemente consiste en elevar la rodilla por unos 30 segundos cada una. Esto ayuda a activar los músculos de las piernas y tener una mejor movilidad de cadera.
- Desplantes laterales
Seguimos con otro estiramiento fundamental, el cual permite tener una estabilidad lateral, mientras que los músculos estabilizadores se activarán. Se recomiendan 10 repeticiones por cada lado.
- Giros de tronco
Es imperativo sumar los ejercicios de tronco de este tipo porque permite movilizar la columna vertebral y calentar los músculos de la parte del torso. Esto es importante para tener una postura correcta en tu carrera y así no sufrir lesiones en la espalda.
- Círculos de tobillo
Tal como lo señala su nombre, el proceso consiste en rotar el tobillo de una dirección a otra por unos 15 segundos. Esto ayuda a calentar las articulaciones y los músculos del pie, la zona que estará expuesta a lesiones como torceduras o esguinces.
- Giros de cadera
Por último, cerrarás con ejercicios de giros de cadera que ayudarán a calentar la zona pélvica. Además, es esencial para mejorar la flexibilidad, así tengas una sesión de carrera o caminata mucho más cómoda.
Esta es la rutina que debes empezar a seguir en tu día a día, justo antes de salir a correr o trotar de forma cotidiana, como sueles hacer, y así evitar lesiones en algún punto.