La manicura y sus propuestas de nail art siempre cambian con el paso de los años, algunas muy usadas en el pasado se ponen de moda en el presente y con el tiempo se olvidan y así comienza de nuevo el ciclo, sin embargo, hay un modelo que siempre se reinventa y son las clásicas uñas francesas.
La manicura francesa vive dando giros para adaptarse a lo que está en tendencia. El popular modelo formal y discreto que se centra en una base clara o nude con una pronunciada línea blanca en la parte superior ha cambiado varias veces su estilo, volviéndose a veces más llamativa o elegante y otras tantas más divertida o juvenil.
En el presente existen 5 originales propuestas de nail art partiendo del modelo central de esta clásica manicura, donde la línea blanca se transforma bien sea en forma, en color o en cantidad, dependiendo del propósito, es decir, si se busca un resultado tradicional, casual, muy llamativo o glamoroso.
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El primer modelo de manicura es el clásico, el cual muchas mujeres siempre eligen por su impecable resultado. Es el ya conocido que tiene la base transparente, rosada o nude con las puntas blancas. Es ideal para quienes buscan algo formal, discreto y prolijo.
Para quienes quieren salir de lo convencional, le restan estos cuatro modelos: uno de ellos es el francés de colores que sustituye la línea blanca por una de otro color, lo que hace más informal y divertido el resultado final. También está el francés con diseños, en el cual, la línea blanca se cambia por una con figuras pueden ser corazones, patrones de animal print o flores.
Otra alternativa es el francés doble, un nail art que en lugar de una línea blanca tiene dos, bien sea en ese color o en otro y finalmente está la manicura francesa con pedrería que es una de las ideas más glamorosas y se logra colocándole piedras o perlas en la zona o área donde originalmente va la línea blanca.