En el mundo del Nail Art, elegir la forma adecuada para las uñas va más allá de una simple cuestión de gustos. La elección entre una uña almendrada o cuadrada no solo responde a tendencias estéticas, sino que también debe adaptarse a la forma de las manos.
Para las personas con manos pequeñas y dedos finos, las uñas redondeadas, ovaladas o en forma de almendra son las que más favorecen, ya que ayudan a estilizar las manos y las hacen parecer más alargadas.
La forma almendrada es altamente versátil y cómoda. Con un diseño que sigue una línea alargada y ovalada, es ideal para quienes buscan un toque de elegancia sin la rigidez de las uñas cuadradas.
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En el caso de las manos más grandes, las formas recomendadas incluyen la semicuadrada, redonda o coffin. Las uñas semicuadradas mantienen una línea recta suave en los bordes, mientras que las coffin, alargadas y con la punta cuadrada, ofrecen un aspecto sofisticado y moderno.
Para quienes tienen dedos más gruesos, lo ideal es optar por uñas cuadradas, que además de estilizar visualmente, promueven un crecimiento saludable y fuerte de las uñas.
El cuidado de las uñas también implica una técnica de limado adecuada. Se recomienda dejar que las uñas crezcan rectas en los laterales antes de darles forma, asegurándose de limarlas desde las esquinas hacia el centro para mantener su fuerza.