Las monedas antiguas, más que simples objetos de cambio, son ventanas al pasado que pueden despertar la fascinación de los coleccionistas y, además, son buscadas por los inversionistas que ingresan al mercado de la numismática. En este contexto, una moneda de 5 pesetas de 1997, proveniente de las Islas Baleares, ha cobrado un valor extraordinario alcanzando un precio de hasta 1.650 euros.
Esta moneda de 5 pesetas de las Islas Baleares, acuñada en la década de 1990, forma parte de una serie que circuló en España durante la transición del siglo XX al XXI. Su diseño, que presenta el busto del Rey Juan Carlos en el anverso y el escudo de las Islas Baleares en el reverso, la convierte en un símbolo de la historia y la cultura española, a la que la numismática no le ha sacado los ojos de encima.
¿Por qué es valiosa la moneda de 5 pesetas de las Islas Baleares?
El valor de la moneda de 5 pesetas de 1997 radica en un error de acuñación poco común, conocido como "doble cospel". Este error ocurre cuando dos discos metálicos se unen accidentalmente durante el proceso de acuñación, creando una pieza más gruesa y pesada de lo normal.
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Esta moneda de 5 pesetas de las Islas Baleares salió de circulación en 2001, cuando se unificó a toda la Eurozona en la unidad monetaria que conocemos como Euro. Desde ese momento, los españoles tuvieron más de una década para cambiar sus viejas pesetas, en billete y moneda, en el Banco de España.
Esto provocó que, con el paso del tiempo, las pesetas desaparecieran no solo de las calles, por lo que comenzaron a convertirse en objetos de deseo por parte de la numismática, que ha llegado a cotizar algunas piezas muy por encima de sus valores nominales.
Las monedas antiguas no solo son un recordatorio del pasado, sino que también pueden ser una fuente de ingresos inesperada. Revisa tus bolsillos, desempolva tus viejos monederos y quién sabe, tal vez tengas un pequeño tesoro en tu poder.