En tan solo 5 minutos podrás servir uno de los platos más nutritivos para toda tu familia, como la tan famosa ensalada de lentejas que serás capaz de preparar rápidamente gracias a una guía sencilla y fácil con la cual te convertirás en un experto en este tipo de recetas.
Lo único que debes hacer es tener a mano la lista de ingredientes y sus respectivas proporciones, solo así no te equivocarás en un preparación que está pensada para salir del paso y servir en pocos minutos.
Ingredientes para estas recetas
- 250 g de lentejas cocidas
- 1 tomate grande picado en cubos pequeños
- 1/2 pepino picado en cubos pequeños
- 1/2 cebolla roja picada finamente
- 1 zanahoria rallada o picada en cubos pequeños
- 1 pimiento rojo o verde picado en cubos pequeños
- 1 aguacate maduro picado en cubos (opcional)
- 50 g de queso feta desmenuzado o en cubos (opcional)
- Un puñado de hojas de perejil o cilantro fresco picado
- Un puñado de aceitunas negras o verdes en rodajas (opcional)
Para estas recetas debes aprender a hacer el aderezo, y esta es la lista de ingredientes que no debes perder:
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- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 2 cucharadas de jugo de limón
- 1 cucharadita de mostaza de Dijon (opcional)
- 1 diente de ajo picado finamente o machacado
- Sal y pimienta al gusto
Instrucciones a seguir
Primero debes preparar las lentejas de la forma común que sueles hacerlas y cuando ya estén tiernas pero firmes, las escurres y las dejas en reposo. Luego, vas a mezclarlas en un bol grande con el tomate, el pepino, la cebolla, la zanahoria, el pimiento, el aguacate, las aceitunas, el queso feta y las hierbas frescas.
Una vez que todo esté bien integrado, podrás avanzar con el siguiente paso con el aderezo. Solo tienes que mezclar el aceite de oliva, el jugo de limón, la mostaza, el ajo picado junto a la sal y pimienta en un bol y asegurar que quede bien emulsionado.
Esta última preparación se la vas a agregar a la ensalada de lentejas y con un cubierto podrás mezclar bien. Esto es esencial en estas recetas caseras, ya que así tendrá un sabor más uniforme. Lo último será servir directamente y rectificar el sabor, por si hace falta sal y pimienta.