No hay duda de que una pared blanca puede transformar cualquier espacio. Su capacidad para ampliar, iluminar y combinar con cualquier estilo decorativo la convierte en una elección popular. Sin embargo, también es cierto que las paredes blancas son propensas a ensuciarse con facilidad. Desde marcas de roces cotidianos hasta manchas más persistentes, mantenerlas impecables puede ser un desafío. Aquí te presentamos tres trucos de limpieza efectivos para devolverles su esplendor:
- 1. El amoníaco es un aliado poderoso en el aseo de paredes blancas. Sigue los pasos de este truco de limpieza:
Preparación: Elige un día soleado para realizar la limpieza. Así podrás ver mejor los resultados y detectar todas las manchas.
Prueba discreta: Antes de aplicar la mezcla en toda la pared, prueba en una zona poco visible para asegurarte de que la pintura acepta el amoníaco.
Te podría interesar
Mezcla: Combina un litro de agua con una cucharada de amoníaco.
Limpieza: Humedece una esponja en la mezcla y frota la pared de abajo hacia arriba. Luego, utiliza un paño húmedo y, finalmente, uno seco.
- 2. Las gomas de borrar no son solo para lápices. También pueden eliminar manchas, rayones y rozaduras en las paredes:
Goma de borrar: Utiliza una goma de borrar para borrar las marcas. Es sorprendentemente efectiva.
Toque final: Limpia la zona con una esponja limpiadora (disponible en tiendas de bricolaje). Solo necesitas humedecerla en agua.
- 3. Esta mezcla casera es ideal para manchas más rebeldes:
Ingredientes: Mezcla agua, jabón de lavavajillas, vinagre blanco y bicarbonato sódico.
Aplicación: Con una esponja, frota la pared en movimientos circulares.
Secado: Deja que la pared se seque naturalmente.
Recuerda siempre probar los métodos en una pequeña área antes de aplicarlos por completo. ¡A mantener la elegancia en casa!
¿Te gustan los trucos de limpieza y aseo? No te despegues de Noticias de México. Existe mucho contenido relacionado con la temática que podría animar tu interés e ingenio.