El baño es el hogar de los malos olores, y si no contamos con trucos de limpieza adecuados, puede convertirse fácilmente en un foco de infección que se percibe por la nariz. Sin embargo, existe un tip con el tubo de papel higiénico que se ha transmitido de generación en generación, y hoy entenderás por qué.
Este método imbatible solo se puede utilizar si eres responsable y atento, ya que implica quemar el tubo. Así como escuchaste, este truco de limpieza consiste en quemar el cartón de tus rollos de papel higiénico.
Aunque lo más probable es que su combustión sea lenta, no debes quitarle los ojos de encima. Esto evitará problemas y dará buenos y rápidos resultados a fin de cuentas. Presta mucha atención porque aquí te mostramos el paso a paso de este truco de limpieza milenario.
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El paso a paso para despedir a los malos olores de tu baño
Los pasos son sencillos, de hecho, tan solo tendrás que sostener el tubo de papel higiénico y, con un encendedor, quemar uno de sus bordes.
Será muy importante que no quede ningún rastro de papel, ya que de lo contrario podrías quemarte y provocar aún más malos olores. Una vez prendido, deja que desprenda el humo sobre una superficie segura y libre de objetos y líquidos inflamables, como la bañera o el lavabo.
Y así de sencillo, el humo que desprenda el rollo eliminará por completo los olores desagradables del baño, sin dejar ningún rastro de aquel invasivo olor a cartón quemado.