Luis Miguel inició su gira por toda América y España el 28 de agosto de 2023, después de estar ausente de los escenarios seis años. La prensa nacional e internacional no hace más que comentar que su regreso está siendo triunfal; sin embargo, mucho se habló de que el "Sol de México" no interactúa en sus presentaciones, ocasionado que surjan rumores sobre un posible doble. Ante estas especulaciones, en su último show en Barcelona, el cantante decidió romper el silencio y se comunicó con su amado público.
En esta última gira, el intérprete de "Ahora te puedes marchar" acostumbró a su público a no mantener diálogo; solo canta su repertorio durante aproximadamente dos horas y se retira de los escenarios en silencio. Esta firme postura de Luis Miguel motivó a que se instale nuevamente la creencia de que tiene un doble y, ante el temor de quedar expuesto ante sus fanáticos, prefiere no dialogar.
El último movimiento de Luis Miguel en Barcelona que sorprende a toda España
Desde el 28 de junio, Luis Miguel se encuentra realizando sus conciertos por las ciudades más importantes de España. Justamente, en su último concierto del 18 de julio en Barcelona, el cantante decidió terminar con los rumores y las teorías conspirativas, dado que en pleno concierto se dirigió a su público y los alentó a seguir disfrutando de las exitosas canciones que lo acompañan desde hace más de cuatro décadas.
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"Vamos, arriba Barcelona. Eso es", con estas palabras Luis Miguel puso fin a los rumores que circularon en este último tiempo sobre sus presentaciones e interactuó por primera vez con su amado público. El concierto del "Sol de México" en su primer Palau Sant Jordi estuvo marcado por su inesperado gesto y último movimiento que terminó conquistando a todos sus fanáticos catalanes, quienes al finalizar el concierto recibieron otra sorpresa por parte del artista más importante de la música en español.
Luis Miguel no solo habló por primera vez en su concierto a las 23.07, sino que tras finalizar su presentación al son de "Cuando calienta el sol" permaneció durante tres minutos sobre el escenario más emblemático de Barcelona, aplaudiendo a su público en muestra de agradecimiento por tanto cariño y respeto recibido en todos sus años de carrera.