Los gabinetes de la cocina tienden a acumular grasa que puede ser difícil de eliminar debido a su constante exposición a salpicaduras de aceite, humo y vapores. Afortunadamente, existen trucos de limpieza caseros, sencillos y efectivos para devolverles el brillo y la pulcritud.
Antes de comenzar, es importante proteger tus manos con guantes de goma y asegurarte de que el espacio de trabajo esté bien ventilado.
Para el primer truco de limpieza, mezcla unas gotas de jabón líquido en agua tibia. Humedece un paño suave con esta mezcla y frota suavemente los gabinetes, prestando especial atención a las zonas más sucias. Enjuaga con un paño húmedo limpio y seca con un paño seco.
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Otra opción es mezclar partes iguales de vinagre blanco y agua en un atomizador. Rocía la solución sobre los gabinetes y deja actuar unos minutos. Limpia con un paño suave, enjuaga con agua limpia y seca con un paño.
El tercer truco de limpieza consiste en mezclar bicarbonato de sodio con agua hasta formar una pasta. Aplica la pasta sobre los gabinetes y deja actuar unos minutos. Frota con un paño suave, enjuaga con agua limpia y seca con un paño seco.
Se recomienda limpiar los gabinetes de cocina con regularidad para evitar la acumulación de grasa. Antes de aplicar cualquier producto en toda la superficie, pruébalo en una zona poco visible para asegurarte de que no cause daños.