La rareza y la baja acuñación son dos características que convierten a la moneda de 3 euros de Eslovenia en una pieza más que curiosa para los coleccionistas de la numismática, quienes habitualmente se dedican a acumular monedas de 2 euros, sobre todo las conmemorativas.
Desde su llegada a la circulación, el euro ha sido una de las que más ha evolucionado en cuanto a su diseño y la tecnología empleada en el proceso de fabricación. Además, las diferentes casas de monedas aprovechan cada temporada para lanzar una pieza conmemorativa de 2 euros. Pero lo que pocos ciudadanos conocen es la de 3 euros de Eslovenia.
Entre las conmemorativas de 2 euros, las más buscadas son las ediciones de países como el Vaticano o Mónaco y se pueden conseguir por 2.000 euros. Entonces, no es tan descabellado pensar que las monedas de 3 alcancen pronto cotizaciones similares.
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Numismática: ¿cómo son las monedas de 3 euros de Eslovenia?
Las monedas de 3 euros pueden ser raras para todo el mundo menos para los eslovenos, que conviven con estas desde que fueron acuñadas a partir de 2008. Son piezas que conmemoran acontecimientos y personajes importantes de la historia del país, por ejemplo, su primera edición estuvo dedicada a la presidencia eslovena de la UE en ese año.
En 2021, se emitió una moneda conmemorativa por el 300 aniversario de la Pasión de Škofja Loka; en 2022, se rindió homenaje al 150 aniversario del nacimiento del pintor Matija Jama y en 2023 se conmemoró el 110 aniversario del nacimiento de Boris Pahor.
Físicamente similares a los euros corrientes, estas se diferencian por su tamaño ligeramente más grande y su canto estriado. Su diseño bimetálico las hacen aún más atractivas para los coleccionistas.
Algunos especialistas señalan que las monedas de 3 euros de Eslovenia representan una continuidad de las antiguas piezas de 500 tolarjev que Eslovenia emitía antes del euro. Su escasez y características únicas las convierten en verdaderas joyas numismáticas.
Aunque su precio actual en el mercado ronda entre 6 y 8 euros, se espera que su valor aumente significativamente en el futuro, debido a su creciente demanda entre los aficionados y los visitantes de Eslovenia, quienes buscan llevarse al menos una como recuerdo.