La relación entre Luis Miguel y Aracely Arámbula, que floreció entre 2005 y 2009, estuvo marcada por muchos altibajos, especialmente después de su separación. Entre los múltiples aspectos que quedaron en el pasado y se pusieron en juego estuvo la lujosa mansión donde vivieron juntos en Bel Air, Los Ángeles, California.
Esta mansión, valuada en aproximadamente 6 millones de dólares, ofrecía un estilo de vida de lujo y confort. La propiedad que habitaron el cantante y la actriz cuenta con dos salas, una cocina completamente equipada, un amplio patio, terraza, alberca, jacuzzi, cinco habitaciones y cinco baños. La decoración de la mansión mezclaba colores neutros, detalles de madera y elementos clásicos, lo que refleja la elegancia y el buen gusto que caracterizaban a la pareja durante su convivencia.
La vida en esta residencia reflejaba la opulencia y el estatus de Luis Miguel como uno de los cantantes más exitosos de América Latina. Sin embargo, tras su separación, la mansión también se convirtió en un símbolo de los altibajos de su relación. La casa, que alguna vez fue un hogar lleno de amor y lujo, fue puesta en venta, lo que marcó el fin de una era para ambos.
Otras propiedades
La venta de la mansión de Bel Air no es el único ejemplo de propiedades significativas en la vida de Luis Miguel. Su casa de infancia en Cuidad de México, aunque más modesta en comparación, también ha tenido su historia. Esta vivienda, con 123 metros cuadrados de terreno y 206 metros cuadrados de construcción distribuidos en cuatro niveles, incluía sala, cocina, comedor, tres recámaras, 2.5 baños, estudio, terraza, bodega y estacionamiento para dos autos. Esta propiedad, aunque menos lujosa, mantiene su valor sentimental e histórico en la vida del cantante.
Además de estas propiedades, Luis Miguel también ha tenido otras residencias en lugares como Acapulco, donde su famosa casa frente al mar ha sido un símbolo de su éxito y estilo de vida. También tiene propiedades en otros lugares de México, Estados Unidos y España, lo que refleja su estatus como una estrella internacional.
La relación con Aracely Arámbula no solo dejó huella en la vida personal de Luis Miguel, también en su legado inmobiliario. Las casas donde vivió cuentan historias de amor, éxito y también de las complejidades de su vida.