Las quesadillas, un pilar culinario de la dieta de México, son una deliciosa combinación de tortillas de maíz o harina rellenas de queso derretido acompañadas de ingredientes adicionales como carne, verduras o frijoles. Este plato representa mucho más que un simple acto de nutrición, es una expresión de la rica tradición gastronómica y cultural del país.
En la dieta mexicana, las quesadillas son una fuente de nutrientes importantes, como proteínas y carbohidratos, gracias al queso y las tortillas. Sin embargo, para los expertos en alimentación, consumirlas en exceso puede tener consecuencias negativas para la salud.
Esto es lo que puede ocurrir si comes muchas quesadillas
La forma en que se prepara este plato puede influir en su valor nutricional: freírlas en aceite aumenta su contenido de grasas saturadas y calorías, lo que puede contribuir al aumento de peso y del riesgo de enfermedades cardiovasculares, entre estas, la hipertensión arterial, enfermedad coronaria o infarto de miocardio.
Por otro lado, el queso utilizado en las quesadillas también puede ser una preocupación nutricional debido a su alto contenido de sodio y grasas saturadas. El exceso de sodio en la dieta está asociado con problemas de presión arterial alta y enfermedades cardiovasculares, mientras que las grasas saturadas pueden elevar los niveles de colesterol en la sangre, aumentando el riesgo de enfermedades del corazón.
Para disfrutarlas bajo los patrones de nutrición, es importante optar por versiones más ligeras. Por ejemplo, se pueden utilizar tortillas de maíz en lugar de tortillas de harina, ya que contienen menos calorías y grasas. Además, se puede optar por cocinar las quesadillas a la plancha en lugar de freírlas, reduciendo así la cantidad de aceite añadido y grasas saturadas.
Para acompañar las quesadillas de manera más saludable y garantizando una correcta nutrición, se pueden servir con guarniciones frescas, como pico de gallo, guacamole o una ensalada verde. Estas opciones añaden sabor y textura sin agregar grasas adicionales.
No podemos ignorar la importancia cultural de las quesadillas en la cocina mexicana, que continúan siendo una parte integral de la identidad gastronómica del país, así que el punto clave en esto es consumirlas con moderación y de manera consciente de su preparación.