Para los cultores de la numismática, las monedas no son solo objetos de cambio, sino pequeñas obras de arte con historias fascinantes. Entre las más buscadas se encuentran las del Vaticano, acuñadas desde la creación del euro con diseños únicos y exclusivos.
Las monedas del Vaticano ocupan un lugar especial dentro del mundo de la numismática. Si bien la Ciudad del Vaticano no forma parte de la eurozona, tiene un acuerdo con Italia que le permite acuñar sus propias monedas en euros desde su creación. Este acuerdo fue renegociado y entró en vigor el 1 de enero de 2010.
Existen dos monedas que lograron notoriamente la atención de la numismática, principalmente por su diseño y por el material con el que fueron fabricadas en la última década, por lo que son muy buscadas por los coleccionistas y por los inversores.
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Numismática: las dos monedas más buscadas del Vaticano
10 euros "El Bautismo": diseñada por Cristina de Giorgi, representa el sagrado sacramento con Jesús en el agua y el Espíritu Santo. Fabricada en oro 917/1000, con un diámetro de 13,85 mm y un peso de 3 gramos. Su precio inicial fue de 195 euros, pero en el mercado de coleccionistas puede alcanzar hasta 279 euros.
100 euros "Dei Verbum": conmemora la Constitución Apostólica sobre la Divina Revelación del Concilio Vaticano II. En el reverso, se observa a Cristo con los apóstoles y en el anverso, el escudo papal con los símbolos de los evangelistas. Fabricada en oro 917/1000, con un diámetro de 35 mm y un peso de 30 gramos. Su precio inicial fue de 1.750 euros, pero en el mercado de coleccionistas puede llegar a 2.650 euros.
¿Por qué son tan valiosas estas monedas de El Vaticano?
Exclusividad: se acuñan cantidades limitadas, lo que las convierte en piezas raras.
Diseño original: cada moneda tiene un diseño único que refleja la cultura e historia del Vaticano.
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Material: fabricadas en oro de alta pureza, lo que aumenta su valor intrínseco.