El atole es una bebida prehispánica arraigada en la cultura mexicana que ha sido durante siglos un elemento indispensable en las celebraciones y rituales. Esta deliciosa bebida, conocida también como atole blanco o de masa, ha evolucionado con el tiempo e incorporado una amplia variedad de sabores e ingredientes, como la guayaba, que le añaden un toque de frescura y sabor exquisito a esta receta.
El "Día de la Candelaria", una festividad profundamente arraigada en la cultura mexicana, es especialmente conocido por ser el momento ideal para disfrutar esta receta. Esta bebida tradicionalmente se sirve junto con tamales, lo que crea una combinación perfecta de sabores y texturas que deleitan los paladares y alimentan el espíritu.
Si estás buscando una manera deliciosa y nutritiva de preparar un atole de guayaba sin lácteos, estás en el lugar correcto. Aquí tienes una práctica receta para que puedas disfrutar de esta delicia en la comodidad de tu hogar:
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Ingredientes:
- Dos litros de agua
- Una rama de canela
- Tres kilos de guayaba
- Cuatro cucharadas de fécula de maíz sin sabor
- Azúcar al gusto
Preparación:
En una olla grande, coloca los dos litros de agua y añade la raja de canela. Lava las guayabas y retira los rabos. Agrégalas a la olla junto con la canela y el azúcar. Cocina a fuego medio durante aproximadamente diez minutos, o hasta que las guayabas estén blandas.
Retira la canela y vierte las guayabas con el agua en una licuadora. Licúa hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Vuelve a verter la mezcla en la olla y coloca a fuego medio.
En un vaso con agua fría, disuelve la fécula de maíz y agrégala a la olla con la mezcla de guayabas. Cocina a fuego medio, moviendo constantemente, durante unos 20 minutos o hasta que la mezcla adquiera la consistencia deseada. Una vez listo, sirve el atole caliente y disfruta de su delicioso sabor y aroma.