Conocer a fondo la forma del rostro es importante para cualquier tratamiento de belleza, sin embargo, para el diseño de las cejas es sumamente crucial.
Esto se debe a que las cejas pueden ser la clave para acentuar cada parte de tu rostro y llevarte a tener un cambio de imagen sorprendente. Si aún no sabes por dónde empezar, te aconsejamos que sigas leyendo para descubrir las maravillas de belleza que tus cejas pueden hacer por ti.
Inicio Perfecto
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Para comenzar este tratamiento de belleza, es importante alinear el punto de partida de tus cejas con la parte externa de tu nariz. Este principio aplica a todos los tipos de cejas. Un truco útil es usar un lápiz y alinear la aleta de la nariz con el lagrimal para encontrar el punto exacto.
Arco Definido
El arco se forma en el punto más alto de la ceja. Para definirlo, crea una diagonal desde la aleta de la nariz hasta la ceja, pasando por el centro del ojo. Utiliza un lápiz o una brocha fina para trazar esta línea. Una sombra o perfilador te será útil para realzar este punto si es necesario. La determinación del arco juega un papel clave en la expresión de la mirada.
Punta Precisa
Determina dónde termina la ceja trazando una línea diagonal desde la parte exterior de la nariz hasta la ceja y pasando por el final del ojo. Si termina antes de este punto, extiende la línea con un lápiz o sombra para definir tus cejas.
Tipos de Cejas
- Cejas curvas: Con forma de media circunferencia, ideales para rostros cuadrados o triangulares ya que añaden equilibrio sin ángulos marcados.
- Cejas marcadas o arqueadas: Con un arco definido, perfectas para la forma del rostro redondo al agregar un toque de dureza y misterio.
- Cejas rectas y horizontales: Con un arco apenas marcado, favorecen a caras alargadas al percibirse más ovaladas. Pueden ser finas o gruesas y lucir mejor con una apariencia natural.
- Cejas cortas: Pueden hacer que los ojos parezcan más pequeños. Alárgalas con un lápiz o sombra para crear un sutil arco y dar expresividad.
- Cejas finas: Si son naturalmente delgadas, utiliza lápices, sombras o geles para darles más grosor y densidad. Si las tienes finas por depilación.