Los microondas son una fuente de bacterias que a menudo solemos ignorar, pero con el tiempo pueden volverse perjudiciales si no utilizas los trucos de limpieza adecuados para eliminarlas.
Afortunadamente, deshacerte de este problema es más sencillo de lo que crees con un truco de limpieza especial; aquí te mostramos varios.
Deja tu microondas saludable y como nuevo con estos tips
El primer paso de los trucos de limpieza más efectivos es retirar todas las salpicaduras a medida que se formen. De esta manera, los residuos no se secarán ni contaminarán el interior del microondas. Un paño con agua tibia puede resolverlo en un tris.
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Sin embargo, si hay manchas persistentes, lo mejor será que utilices bicarbonato de sodio, jabón suave o detergente para platos. Es importante que no uses lana de acero ni limpiadores tóxicos y/o invasivos, ya que esto podría afectar la vida útil del microondas.
Si deseas eliminar olores y residuos de comida, será mejor que formes una mezcla de bicarbonato de sodio o media taza de zumo de limón en un recipiente de vidrio apto para microondas. Luego, calientala hasta que hierva.
Deja que la mezcla se enfríe sin abrir la puerta; el propio vapor irá aflojando toda la suciedad y eliminará los olores.