La hora en que realizas tus ejercicios puede tener un impacto significativo en tu esfuerzo por bajar de peso, según diversos estudios. La Universidad de California señala que la mejor hora para ejercitarse es por la mañana en ayunas, ya que el cuerpo utiliza las grasas acumuladas como fuente principal de energía. Durante el ayuno nocturno, los niveles de insulina son bajos, lo que favorece la quema de grasas durante la actividad física matutina.
Por otro lado, el Instituto de Ciencia Weizmann de Israel sugiere que a la tarde y las primeras horas de la noche son las más adecuadas para la actividad física. Durante este período, la temperatura corporal es más alta, lo que puede mejorar el rendimiento y la eficiencia del ejercicio. La mayor temperatura corporal favorece la flexibilidad muscular y la capacidad de resistencia, lo que permite entrenamientos más intensos y efectivos.
En cuanto a si es mejor hacer ejercicios en ayunas o después de comer, ambos enfoques tienen sus pros y contras. Ejercitarse en ayunas puede ser beneficioso para quemar más grasa, pero también puede ser contraproducente para algunas personas. El organismo, al estar agotado o debilitado después del período de ayuno, puede no tener la energía suficiente, lo que podría llevar a una disminución del rendimiento y, en casos extremos, a mareos o desmayos.
Hacer ejercicio después de comer, en cambio, puede ser más adecuado para aquellos que necesitan tener energía y rendimiento óptimos durante sus entrenamientos. Se recomienda esperar al menos dos horas después de una comida para evitar problemas digestivos y permitir que el cuerpo esté en su mejor forma para el ejercicio. Esto garantiza que los niveles de glucosa en sangre sean suficientes para un rendimiento eficiente.
Lo realmente importante, sin embargo, no es tanto la hora en que se hace ejercicios, sino mantener una rutina constante. La consistencia en la actividad física es clave para una pérdida de peso saludable y sostenida en el tiempo. Crear y seguir una rutina diaria o semanal contribuye a establecer un hábito que, a largo plazo, resulta en un mejor control del peso y una mejora general de la salud.
Lo bueno de bajar de peso
Bajar de peso tiene múltiples beneficios para la salud. Un peso inadecuado puede llevar a problemas graves como enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, y problemas articulares. Mantener un peso saludable mejora la calidad de vida, aumenta la energía diaria, y reduce el riesgo de enfermedades crónicas.
Ya sea por la mañana, tarde o noche, lo importante es encontrar un horario que funcione para ti y mantener una rutina de ejercicios constante. La disciplina y la elección del momento adecuado pueden hacer una gran diferencia en tu viaje hacia una vida más saludable y en forma.