Pocas tendencias de belleza logran trascender el paso del tiempo con la gracia y sofisticación de la manicura francesa. Desde su aparente sencillez hasta su innegable capacidad para realzar cualquier look, este clásico del nail art se mantiene como una opción predilecta para quienes buscan un toque de elegancia discreta.
Si creías que la manicura francesa se limitaba a la clásica base rosa nude con la punta blanca, prepárate para sorprenderte. Los expertos en nail art han tomado este lienzo atemporal y lo han transformado en una fuente inagotable de creatividad, pues ofrecen opciones para todos los gustos y estilos.
Aquí te presentamos 6 diseños de nail art que comprueban que la manicura francesa está más viva que nunca:
1. La francesa invertida: un giro moderno al clásico. En lugar de la punta blanca tradicional, se aplica una línea de color (dorado, plateado, negro o incluso un tono vibrante) en la base de la uña, justo sobre la cutícula. Esta variación aporta un toque de originalidad sin perder la esencia elegante de la francesa.
2. La francesa con glitter: para quienes buscan un toque de glamour, añadir glitter a la punta blanca es una excelente opción. Se puede optar por un glitter fino y sutil o por partículas más grandes para un efecto más llamativo. Incluso se puede degradar el glitter desde la punta hacia el centro de la uña.
3. La francesa de colores: rompiendo con la tradición del blanco, esta versión permite jugar con una infinidad de combinaciones de colores. Se puede elegir un color pastel para un look delicado, tonos neón para un estilo audaz o incluso combinar dos colores diferentes en cada uña.
4. La francesa diagonal: una forma geométrica que aporta dinamismo y modernidad. La línea que separa la base del color de la punta se dibuja en diagonal, lo que crea un efecto visual interesante y diferente.
5. La microfrancesa: ideal para uñas cortas o para quienes prefieren un estilo minimalista. La punta blanca se reduce a una línea muy fina, casi imperceptible, pero que aporta un toque de pulcritud y sofisticación.
6. La francesa texturizada: incorporar texturas a la punta blanca es otra forma de reinventar este clásico. Se puede utilizar esmalte con efecto arenoso, glitter grueso o incluso aplicar pequeñas tachuelas o strass para un acabado único y original.