En el vasto universo de la perfumería, donde las tendencias efímeras se suceden, existen fragancias que trascienden el paso del tiempo, convirtiéndose en auténticos clásicos. Este es el caso de Infusion d'Iris de Prada, un aroma que, con su elegancia sutil y su frescura inconfundible, ha conquistado corazones durante casi dos décadas.
Infusion d'Iris, lanzada en 2007, se ha ganado un lugar privilegiado en el tocador de muchas personas gracias a su aroma limpio y cómodo. Su creadora, la perfumista Daniela Andrier, logró capturar la esencia del iris, una flor que simboliza la pureza y la elegancia, y la combinó con notas cítricas y amaderadas para crear una fragancia atemporal.
La fragancia se abre con notas de salida frescas y luminosas, como la flor de naranjo africano, la mandarina y el neroli. En el corazón, el iris despliega su elegancia empolvada, acompañado de notas verdes y resinosas que le aportan profundidad y carácter. Finalmente, las notas de fondo de cedro, incienso y vetiver le dan un toque cálido y envolvente, creando una estela duradera y memorable.
Infusion d'Iris es una fragancia versátil que se adapta a cualquier ocasión. Su aroma limpio y discreto la hace perfecta para el uso diario, ya sea en el trabajo, en la universidad o en una salida informal. Sin embargo, su elegancia sutil también la hace adecuada para eventos más especiales, como una cena romántica o una reunión de negocios.
A lo largo de los años, Infusion d'Iris ha cosechado numerosos premios y reconocimientos, consolidándose como un clásico de la perfumería moderna. Su éxito radica en su capacidad para evocar la sensación de limpieza y pureza, sin renunciar a la elegancia y la sofisticación.
Flower de Kenzo
Otra fragancia que ha dejado una huella imborrable en el mundo de la perfumería es Flower by Kenzo. Creada por Alberto Morillas en el año 2000, esta fragancia floral empolvada se ha convertido en un icono gracias a su aroma único y su frasco distintivo, inspirado en una amapola roja.
Flower de Kenzo es una oda a la feminidad, un aroma que captura la esencia de la mujer moderna: fuerte, delicada y apasionada. Sus notas de salida de grosella negra y mandarina dan paso a un corazón floral de violeta, rosa y opopónaco, que se funde con un fondo cálido y sensual de vainilla y almizcle blanco.