Los organizadores resultan muy útiles en el hogar para almacenar objetos y así evitar mantenerlos regados, lo que genera caos o desorden. Estos artículos son muy fáciles y económicos de hacer si se ponen en práctica ideas de reciclaje. Una simple caja de cartón puede ser la protagonista de esta iniciativa.
La cuenta de Instagram @diycomeliartes explica cómo hacerlo. Una vía es con la reutilización de una caja de cartón; en lugar de desecharla, puedes transformarla en un organizador decorativo con el que, además, evidenciarás tus habilidades manuales, tu ingenio y creatividad.
Para poner en práctica esta tarea de reutilización, solo se requiere de la caja de cartón, retazos de tela, un cordón de algodón, pega de silicona, una brocha, pegamento de zapatos, unos corchos, cuencas, abalorios o pequeñas piedras. Además, necesitarás unas argollas o aros.
El primer paso para este reciclaje es forrar o cubrir la caja de cartón con el retazo de tela. La autora del proyecto lo hizo en dos partes: un segmento de la caja lo forró con este textil y el otro lo hizo con el cordón de algodón. En este paso, no se puede olvidar forrar el interior de este organizador y también su base externa.
Una vez lista esta etapa, la siguiente fase consiste en agregar detalles decorativos para mejorar todavía más este proyecto. En este caso, puede ser una base o cuatro patas, las cuales se pueden hacer con retazos de corcho, cuencas, abalorios, piedras decorativas o incluso canicas, o algún otro material que sobre en casa y que pueda cumplir esta función. Si te agrada la idea de colocarle asas, puedes hacerlas con argollas plásticas o con lo que te sobre del mismo cordón de algodón que usaste para forrarla.
Pero si en casa no tienes cajas de cartón, esto no te limitará para poner en práctica este trabajo de reciclaje. También puedes hacerlo con un bidón, una botella plástica, un frasco o un recipiente de detergente, siempre que adecues su forma para el nuevo fin. Por lo general, esto se hace cortando el recipiente por la mitad y retirando justo la parte donde está la boca o pico de la botella, por donde sale su contenido.