Puede ocurrir que tu habitación no cuente con la mejor iluminación posible, pero no te alarmes, ya que con unos simples trucos de decoración puedes transformar el espacio totalmente, y lo mejor de todo es que no tendrás que gastar mucho dinero en el proceso.
La clave es usar la creatividad y seleccionar la mejor alternativa entre las que te vamos a plantear a continuación. Esta es una guía sencilla y práctica que no debes subestimar.
5 formas de hacer una decoración luminosa
- Colores claros y neutros
Empezamos con algo básico: paredes y techos pintados de un tono claro y neutro. Se recomiendan colores blancos, beige o grises claros para reflejar la luz artificial y hacer que el espacio se sienta más abierto.
- Iluminación estratégica
En este caso, puedes hacer una decoración con luces LED con tonos cálidos o neutros que imiten la luz natural. Eso sí, estas lámparas deben ser instaladas en las zonas de mayor concurrencia en tu habitación y así puedas estar siempre iluminado.
- Espejos grandes
Seguimos con otro truco de decoración sencilla, el cual consiste en colocar un espejo grande en una pared central para reflejar la luz y dar la ilusión de profundidad. Así de simple, será más que suficiente para crear un efecto aún más luminoso.
- Materiales reflectantes
Prácticamente el punto anterior pero con otros materiales como mesas de vidrio, o elementos decorativos con acabados metálicos. Tienes la oportunidad de comprar accesorios, jarrones de cerámica, marcos brillantes o lámparas cromadas.
- Textiles ligeros
Finalmente, en tu decoración no puede faltar el uso de cortinas ligeras que sean translúcidas o estores en tonos claros si la habitación conecta con otra con ventanas. Esto es esencial para dar una sensación de limpieza y claridad.