Algunas tendencias de decoración del pasado vuelven para quedarse. Este 2025, los muebles vintage están tomando protagonismo en el mundo del interiorismo, demostrando que lo clásico nunca pasa de moda.
Los muebles vintage van desde vitrinas elegantes hasta sofás emblemáticos, evocando nostalgia, carácter y sofisticación a los hogares contemporáneos. Hay cinco piezas icónicas que están marcando tendencia este año.
Las vitrinas o alacenas regresan con fuerza. Este mueble es conocido por su estructura robusta y funcional, perfecto para almacenar cristalería, vajilla o incluso libros y objetos decorativos.
El sofá chéster es una pieza reconocida por su tapizado capitoné y sus brazos redondeados. Este sofá es sinónimo de lujo y durabilidad. Aunque tradicionalmente se fabricaba en piel oscura, hoy en día se pueden encontrar versiones en terciopelo, gamuza o polipiel en una amplia gama de colores.
Los aparadores bajos vuelven a ser protagonistas en salones y comedores. Estos muebles combinan estética y funcionalidad, son ideales para espacios pequeños gracias a su diseño compacto. Suelen tener patas expuestas y una estructura minimalista que añade un toque retro sin recargar el ambiente.
Los tocadores están de vuelta, reinventados para los dormitorios modernos. Este mueble práctico y decorativo combina un espejo amplio y una superficie de trabajo cómoda, ideal para la rutina diaria. Los diseños actuales van desde opciones clásicas en madera hasta versiones con acabados lacados.
Las butacas con otomana vuelven renovadas con tejidos y colores modernos. Estas piezas están diseñadas para brindar el máximo confort son ideales para crear un rincón de lectura o relajación.