Hay una planta que no puede faltar en tu jardín y es la orquídea, una especie que se destaca por la elegancia de sus flores, las cuales poseen colores vibrantes que pueden embellecer cualquier espacio de tu hogar. Las orquídeas tienen muchas virtudes, pero la que más se destaca es su fácil cuidado.
No obstante, hay un factor que no se puede pasar por alto en el mantenimiento de estas plantas y es una poda correcta para que sus flores crezcan sanas y abundantes. Debes saber que, al podarlas, no solo ayudarás a que se desarrollen de manera saludable, sino que además tendrás garantizada una temporada de floración con un extra de belleza.
La mejor época para podar tus orquídeas es después de la etapa de floración, cuando la planta comienza su fase de reposo (dormancia). Las orquídeas entran en este lapso en otoño, lo que hace que esta estación del año sea ideal para podarlas.
Pasos para podar tus orquídeas correctamente
- 1. Herramientas adecuadas: para podar nuestras plantas debemos tener unas tijeras de poda, en lo posible que sean pequeñas para poder manipularlas con seguridad.
- 2. Identificar el área de poda: los tallos que deben ser cortados son los que sostenían las flores. Tienes que hacer corte por encima del nudo, ya que esto garantizará la formación de nuevas flores. Ten en cuenta que si estos tallos tienen hijuelos, lo que serían pequeños brotes, lo aconsejable es no podar esta vara.
- 3. Elimina hojas amarillas: no olvides quitar las hojas amarillas, ya que estas impiden que ingrese la luz solar y el aire al tallo.