Los frascos de vidrio tras su propósito original pueden seguir en tu cocina con nuevos usos y uno de estos es como especieros o contenedores de las especias y condimentos para la preparación de los platillos. La idea es poner en práctica el reciclaje y a la vez contar con estas herramientas al alcance de la mano y dispuestas de una manera muy funcional.
Existen 5 tipos de especieros, todo dependerá del contenido que les coloques dentro y del uso específico que les des. Estas propuestas de reúso tienen en común, además de la idea de sostenibilidad, el almacenaje cómodo, económico, creativo y personalizado.
Los frascos de papillas son uno de los modelos de recipientes que pueden funcionar como especieros y son muy frecuentes entre quienes son madres. Los que son de cristal también pueden ser reciclados, especialmente aquellos donde previamente se colocaba la sal y la pimienta.
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Los recipientes de plástico también se pueden incluir en este proyecto de reciclaje, especialmente los que ya han sido usados para guardar los colores o los crayones, también los de mayonesa o los de estilo Mason Jars, los cuales, además, ofrecen un bonito aspecto decorativo.
¿Cómo puedes disponer de estos frascos en tu cocina?
La manera de disponerlos en tu cocina también puede variar, todo dependerá de tu espacio, la dinámica en tu cocina y tu creatividad. Una manera de colocarlos es con el uso de un imán y haciendo de estos frascos unos magnéticos, los cuales ocupan menos espacio y puedes incluso colocarlos en la puerta de tu refrigerador.
Otra alternativa para exhibir este proyecto de reciclaje tan funcional es haciendo uso de tornillos y ajustándolos por medio de su tapa a los mobiliarios de la cocina, de esta manera, se mantendrán en un lugar fijo y solo será necesario desenroscar cuando se requiera de alguna especia. Finalmente, puedes precisar de un cajón o gaveta exclusiva para ellos, en cualquier caso no olvides colocarles una etiqueta para identificar su contenido.