Con el reciclaje se le saca provecho a todo, incluso los esmaltes de uñas. Estos productos si ya no resultan adecuados para la manicura pueden cumplir una segunda función en el hogar al convertirse en los ingredientes claves para decorar artículos pequeños, como brads o broches de papelería, por medio de la elaboración de enamels o gotas decorativas.
Para lograr esta propuesta de reutilización, solo necesitarás una pistola de silicona, esmaltes de uñas de colores y brads o broches de papelería. Lo primero que harás es elaborar los enamels o las gotitas decorativas que se lograrán gracias a un método muy simple.
Para continuar esta propuesta de reciclaje, buscarás una superficie adecuada para colocar pequeñas gotas de silicona y las dejas secas. Una vez listas, las recubres con el esmalte que escogiste previamente y dejas de nuevo que unifiquen y sequen. Cuando estén secas, las despegas y listo.
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Estos enamels caseros y reciclados se pueden usar para diversos tipos de manualidades a las que se le quiera dar un toque divertido o añadir relieve o textura. También se incorporan a piezas de bisutería, tarjetas de cumpleaños, páginas y álbumes de recortes, entre muchas otras creaciones.
Esta misma técnica la puedes emplear para cambiar el aspecto de los broches de papelería. Para lograrlo, haz las mismas gotas de silicona y fija la base o cabeza del broche en estas; al secarse pinta con esmalte de uñas.
Más ideas para reciclar el esmalte de uñas
Con los esmaltes de uñas que ya no uses, pon en práctica otros proyectos de reciclaje, como piedras decorativas que luego puedes usar para el embellecimiento de jarrones, pintar los moldes de arcillas o masas, los imanes para el refrigerador, cambiar el aspecto o el color de las cuentas para pulseras o collares, hacer arte en tela o personificar herramientas.