¿Tienes un pequeña sala que necesita más espacio? ¿La falta de luz lo hace parecer compacto? No te preocupes, tenemos once trucos infalibles de decoración para que este sitio tan vital del hogar se vea más grande, luminoso y brillante.
Esquema de colores sencillos para decoración: opta por tonos monocromáticos en las paredes y muebles. Los claros y cálidos realzarán el espacio, mientras que los oscuros pueden hacerlo sentir más reducido.
Texturas suntuosas: usa texturas como alfombras de piel de oveja, madera veteada y terciopelo. Estas añaden calidez al diseño sin ocupar visualmente mucho espacio.
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Espejos grandes: agrega espejos grandes para reflejar la luz y crear una sensación de amplitud.
Iluminación por capas: combina lámparas colgantes en el techo con apliques de pared regulables. Dirige la luz hacia arriba y hacia abajo para que el espacio parezca más alto.
Muebles adecuados: opta por muebles “livianos” con patas cónicas y marcos delgados. Evita los muebles voluminosos y oscuros.
Almacenamiento inteligente: mantén las superficies limpias con soluciones de almacenamiento bien pensadas.
Revestimientos reflectantes: elige revestimientos en suelos y paredes que reflejen la luz solar con moderación y buen gusto.
Pisos de madera clara: los pisos de madera encalados dan una sensación de amplitud.
No satures las ventanas: evita tratamientos de ventanas recargados. Deja que la luz fluya libremente.
Proporciones pequeñas: asegúrate de que los muebles tengan proporciones adecuadas o sean visualmente pequeños.
Decoración minimalista: menos es más. No sobrecargues el espacio con adornos innecesarios.
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