Para que las plantas crezcan sanas y fuertes hay que aportarles minerales. Es por ello que, los expertos en la materia hacen uso de la sal marina.
De acuerdo con la información existente, la sal marina es uno de los mejores aliados de los arbustos, puesto que cuenta con minerales como el potasio, calcio, magnesio, bicarbonato, azufre, sulfato y estroncio.
Tales minerales nutren las raíces de las plantas y hacen que estas crezcan sanas y fuertes a través de la fotosíntesis. De esta manera, podrás embellecer en gran medida tu jardín sin gastar demasiado dinero en el proceso.
Beneficios puntuales de la sal marina
En caso de que quieras saber de manera puntual la manera en la que la sal marina beneficia a tus plantas, en este artículo te lo diremos a continuación:
- Aleja los animales que constantemente obstruyen el crecimiento de las plantas, tales como las hormigas, los caracoles y hasta las babosas.
- Nutre de manera significativa las plantas mediante los minerales que contiene la sal marina.
- Controla el nivel de enfermedades, ya que actúa como desinfectante natural. Concretamente, ayuda a prevenir los hongos dañinos del suelo y la proliferación de las bacterias existentes en el jardín.
- La sal marina facilita la absorción del agua de riego e impide la retención de líquidos en las raíces de las plantas, lo que evita que se ahoguen o se pudran de manera interna.
Cómo colocar la sal marina en las plantas
Si quieres usar la sal marina en tus plantas, pero no sabes cómo o de qué manera hacerlo correctamente, en este texto te lo diremos a continuación.
- En primer lugar, debes esparcir un par de cucharadas de sal marina por cada 8 pies cuadrados del suelo (en las raíces de un determinado árbol).
- Después, deberás implementar el riego por goteo durante 20 minutos y listo, habrás completado el proceso.
En este sentido, los conocedores de la materia aconsejan realizar este procedimiento cada 15 días, para que realmente puedas apreciar el cambio tan drástico que hará tu jardín.
En caso de que las plantas sean más pequeñas, usa 1 o 2 cucharadas de sal y realiza el mismo procedimiento sobre el sustrato de las mismas.