La manicura baby nails es una tendencia de nail art discreta y con una característica muy especial: su acabado natural. Es una propuesta muy sencilla y minimalista adecuada para quienes buscan darles a sus manos una apariencia prolija, distinguida y cuidada.
Esta idea estética es muy fácil de lograr porque solo necesitas unas uñas de poca extensión, entre medianas a cortas, y tonos de esmalte pastel, como el rosado, el nude o el blanco. Debido a su simplicidad, se adapta a cualquier look y ocasión, aunque también se convierte en la protagonista de la imagen.
Por lo general, esta manicura es sutil, así que los bordes de las uñas son redondeados, por cual difícilmente se astillan o rompen, tampoco crecen demasiado rápido y su aspecto tiene un aire brillante o barnizado. Son lo más parecido a las uñas en su estado natural.
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Una de las ventajas de lucirlo es que son poco exigentes en su elaboración, así que puedes realizarlas perfectamente en casa tan solo adquiriendo una de las alternativas de esmaltes en tonos rosa transparente. Algunos de los más recomendados son Multi-Use Builder Gel de Le Mini Macaron, Brave Everyday de Neonail y Esmalte de Uñas de Masglo, por citar algunos.
Un toque fuera de lo común en esta manicura
Para quienes deseen variar un poco el patrón de este nail art sin perder su esencia, pueden añadir algunos detalles como sutiles brillos y purpurinas en algunas de las uñas o darles un poco de movimiento con la suma de líneas o puntos, pero en pocas cantidades y dimensiones.
Otra propuesta para versionar este nail art es acudiendo a la popular manicura estilo francesa, con la base en rosa o nude, pero acentuando un poco el grosor de la línea blanca que va en el borde superior. Este modelo debe hacerse en uñas cortas o medianas para conservar su estilo discreto y minimalista.