El aroma a un baño limpio no tiene comparación, después de todo se trata de una zona en la que se pueden acumular malos olores rápidamente, sobretodo en el caño. Sin embargo, con algunos trucos de limpieza caseros podrías evitarlo casi sin esfuerzo.
Para esto es importante contar con algunos productos de higiene de uso cotidiano, incluyendo un elemento comúnmente usado para la cocina. La clave es utilizar el ingenio y la creatividad para aprovechar la versatilidad de estos artículos.
¿De qué se tratan estos trucos de limpieza?
Básicamente, debes tener a la mano lo siguiente:
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- Jabón en barra
- Pasta de dientes
- Bicarbonato de sodio
- Papel aluminio
- Palito de madera
Al momento en que los tengas a mano, puedes iniciar estos trucos de limpieza caseros. Lo primero será tomar el jabón y rallarlo por completo. Luego, agregarás un poco de pasta de dientes e incorporarás 2 cucharadas de bicarbonato de sodio.
Todo esto lo vas a mezclar y vas a formar unas pequeñas bolitas. A continuación, enrolla con papel aluminio y crearás unas pequeñas aberturas con el palito de madera. Finalizado esto, será momento de poner a prueba la efectividad de estos trucos de limpieza.
¿Cómo se hace? Sencillo, lanza una de estas pelotas directamente sobre el depósito de agua del inodoro y poco a poco notarás cómo empezará a aparecer un aroma a limpio, el cual traerá más calma a tu hogar.
Así es cómo se saca el máximo desempeño a estos materiales y productos con los cuales le dirás adiós a los olores más fétidos del caño. Es importante que tomes en cuenta el paso a paso.