Los expertos en el mundo de la jardinería consideran que las plantas crecen sanas y fuertes solo si se les cuida de la manera adecuada.
En ese sentido, los profesionales informan que las matas en general deben contar con buena iluminación, buen riego y, por sobre todas las cosas, un buen abono.
Incluso, en este punto, los conocedores de la materia aseguran que las plantas podrían revivir (en caso de estar debilitadas) con el uso de un abono natural y un elemento primordial para su riego que, a continuación, mencionaremos.
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Se trata de nada más y nada menos que el agua de arroz. Ya está 100% comprobado que este elemento es el que necesita el abono para hacer que las plantas revivan y crezcan saludables.
Cómo humedecer el abono con el agua de arroz
- En un recipiente mediano, vierte una buena cantidad de arroz y llena el recipiente de agua hasta que el primer ingrediente quede completamente sumergido.
- Remueve el arroz con delicadeza y déjalo reposar por unas 3 horas.
- Luego del tiempo estipulado, extrae el agua del arroz y úsala para humedecer el abono de las plantas durante la primera mañana.
- Lo ideal es que a este truco lo repitas 2 o 3 veces por semana, para que las plantas adsorban todos los nutrientes necesarios del abono previamente humedecido con agua de arroz.
Con las indicaciones señaladas, podrás ver resultados en las plantas a partir del segundo día y, si el método se sigue al pie de la letra, en un mes los arbustos estarán completamente relucientes.
Beneficios del arroz para las plantas
Según los expertos, el arroz cuenta con múltiples beneficios para las plantas, entre los cuales destaca el aporte significativo de hierro, potasio, magnesio y zinc, componentes que impulsan el crecimiento saludable de los vegetales.
Además, el arroz enriquece el sustrato, mejora su drenaje y la retención de la humedad, lo que permite que las raíces de la misma no se saturen.
Por si fuera poco, el agua de arroz previene las enfermedades de las plantas por los componentes antioxidantes y bioactivos que posee en su estructura.