El mantenimiento de las bandejas del horno debe tomarse muy en serio, especialmente en aquellas piezas que tienden a almacenar mucha suciedad incrustada en su superficie, lo que eventualmente hará más difícil removerlas. En el peor de los casos prácticamente vas a tener que descartarlas, sin embargo, con algunos trucos de limpieza podrás evitar esto.
Para tu suerte, no hace falta que adquieras costosos productos para esta labor de higienización ni mucho menos, pues la solución seguramente ya la tienes en tu cocina. Lo que sí va a hacer falta es paciencia, dado que esto lleva su tiempo en conseguirse.
Trucos de limpieza para las bandejas del horno
- Bicarbonato de sodio
Empezamos con el siempre confiable bicarbonato de sodio, el cual no podía faltar en esta lista gracias a sus propiedades que ayudan a remover la suciedad. Es un potente desinfectante para muchos electrodomésticos, y en este caso para limpiar la bandeja y la rejilla del horno.
El proceso a seguir es sencillo pues vas a verter en un bol unas 10 cucharadas de bicarbonato y lo vas a mezclar con cuatro de agua y cuatro más de vinagre. Luego vas a aplicar esta solución directamente sobre la bandeja y debes ir frotando con un estropajo después de dejarlo actuar unos dos o tres minutos.
Hazlo poco a poco, porque la espuma sube demasiado rápido y no quieres hacer un desastre. Lo ideal es que veas que se va formando una pasta medianamente espesa. Enjuaga con abundante agua hasta que no queden restos de la mezcla.
- Agua
Vamos con otro de los trucos de limpieza más básicos para tu cocina, como lo es el uso de la vital líquido que, en este caso, se encargará de eliminar la suciedad incrustada en las bandejas del horno.
Ojo, el secreto es hacer este proceso aplicando agua caliente, ya que el calor va a permitir que la suciedad salga con más facilidad.
Para mejorar los resultados debes aplicar un chorro de lavaplatos y dejar la bandeja en una fuente de mayor tamaño con abundante agua caliente y dejar que actúe por unas dos horas.
Pasado ese tiempo ya podrás remover la suciedad con una esponja y agua. Los resultados los podrás empezar a ver por sí solos.
- Limón
Cerramos con un clásico en la limpieza de horno, por lo que naturalmente se puede aplicar para la bandeja de igual modo. Esto se debe gracias a que cuenta con un gran poder desinfectante y protege estar superficies de limpiadores corrosivos.
Primero debes enjuagar la bandeja con agua para eliminar los restos fáciles de expulsar. Luego vas a exprimir un limón, el cual logrará arrancar la grasa además de eliminar los malos olores, por eso, debes añadirlo después de haber enjuagado la bandeja con agua.
Añade también cáscara rayada, verás que hace más efecto. Por último, con el zumo de limón todavía en su superficie lo vas a pasar al horno y lo dejarás calentando por una hora y media para finalmente retirar y enjuagar con abundante agua.
Sigue estos trucos de limpieza y solo así podrás ser capaz de salvar esas bandejas de horno que muy bien sabes, pueden llegar a ser muy costosas en caso de querer desecharlas.