Los crayones son sinónimo de diversión y creatividad en la etapa inicial de la infancia. Los niños y las niñas encuentran en este elemento un atractivo singular que no solo entretiene, sino que a nivel cerebral fomenta el desarrollo cognitivo, la motricidad fina, y la coordinación visual-motora. No obstante, y más allá de todas sus características positivas, resulta un problema para los padres cuando los pequeños manchan con este material las paredes del hogar. Afortunadamente, existen consejos y trucos de limpieza que ayudan a decir adiós a las coloridas obras de arte.
Antes de comenzar con el paso a paso de estos trucos de limpieza, es necesario reconocer que los crayones son herramientas que no solo fomentan la creatividad de los más pequeños, sino que representan un papel importante durante el proceso de aprendizaje de las infancias. Pues, promueven la motricidad fina, mejoran la habilidad visual-motora y ayudan en la capacidad de percepción, entre otras cualidades.
Ahora que ya sabemos que poseen una predominante influencia en el desarrollo del infante, vamos directo a explicar cuáles son los trucos que pueden facilitar la tarea de eliminar las obras lúdicas que dejan los niños en las paredes y sin dañar la pintura.
- Detergente y agua caliente
Llenar un balde con agua caliente, añadir unas gotas de detergente concentrado y con una esponja frotar la pared con movimientos circulares suaves.
- Bicarbonato de sodio
Con un trapo húmedo, aplicar bicarbonato de sodio y refregar la pared manchada con movimientos circulares delicados. Repetir si es necesario.
- Vinagre
En un cepillo de dientes, aplica vinagre y frota sobre la pared cuidadosamente. Luego, utiliza un trapo húmedo para quitar los residuos.
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