En el mundo de la numismática, algunas monedas poseen un aura de misterio y valor que las transforman en auténticos tesoros codiciados por coleccionistas. En México, una de estas piezas es conocida como el “dragón”, un ejemplar inigualable que ha captado la atención de expertos y fanáticos por igual.
La joya de la numismática de la que estamos hablando presenta la imagen de Quetzalcóatl, también conocida como la Serpiente Emplumada, una figura de gran valor en la mitología mexicana y en la cultura mesoamericana. Aunque los dragones son criaturas mitológicas, en México, la figura de Quetzalcóatl es venerada como un emblema de poder, sabiduría y fertilidad.
En el caso de la numismática mexicana, esta peculiar moneda de 5 pesos destaca por su diseño, que muestra una figura que se asemeja a un dragón, pero que en realidad representa a una divinidad azteca. La pieza tiene un diámetro de 27 milímetros y un peso de 10 gramos y fue fabricada en el año 1980, aunque su circulación solo duró hasta 1983.
Lo más intrigante es que solo existen siete ejemplares en todo el mundo, lo que eleva su precio a niveles estratosféricos en el mundo de la numismática. Considerada una rareza entre los coleccionistas, días atrás fue noticia por su precio. Según se publicó el sitio web de TV Azteca, una de estas, específicamente las versiones de 1982 y 1983, puede alcanzar un valor de hasta 3 millones de pesos mexicanos.
La moneda conocida como el “dragón” es mucho más que una simple pieza de metal, es un tesoro cultural y numismático que encierra en sí misma la historia de una de las figuras más simbólicas de la mitología mexicana. Más allá de su valor financiero, es una obra de arte que cautiva a coleccionistas del mundo entero.