Si eres amante de los proyectos DIY de reciclaje, te traemos una idea que llenará de vitalidad tu espacio verde, por más pequeño que sea. Incluso, hasta cabe en una ventana: un bebedero de pájaros hecho con alambre y una botella de vidrio, de esas que suelen terminar siempre en la basura.
Para este singular diseño de un bebedero de pájaros no vas a necesitar demasiados materiales, pero sí poner en juego tu imaginación para llevar adelante este proceso de reciclaje, que tampoco te llevará mucho tiempo, si es que eso te preocupa. Solo hacen falta una botella de vidrio, del color que quieras, y un trozo de alambre de cobre.
Reciclaje: ¿cómo armar un bebedero de pájaros con una botella y alambre?
Materiales
- 1,80 metros de alambre de cobre calibre 6.
- Alicates de agarre de tornillo.
- Botella de vidrio con tapa de rosca.
- Carrete de alambre de cobre calibre 20.
- Adorno (opcional).
- Alicates para joyería.
- Accesorio para comedero.
- Alpiste.
Paso a paso: bebedero para pájaros reciclado
Agarre del cable
Usar los alicates para sujetar el extremo de alambre de cobre grueso (calibre 6). Proteger el cable con un trozo de tela, mientras se crea un rizo apretado al final.
Coloque el cable
Sostener el extremo rizado del alambre cerca del cuello de la botella.
Envolver la botella
Enrollar el alambre alrededor de la botella dos o tres veces, creando un lazo suelto para sostenerla.
Gancho para colgar
Girar el alambre 90 grados y crear un rizo grande usando las mordazas. Este rizo será el punto de suspensión de tu comedero.
Colocar el adorno (opcional)
Cortar un trozo de alambre de cobre más delgado (calibre 20). Conectar el adorno elegido a este cable, luego girar el cable sobre el cable de cobre más grande que ya está enrollado alrededor de la botella.
Retoques finales
Usar los alicates de joyería para crear pequeños rizos decorativos en cada extremo del alambre más delgado.
Llenar y colgar
Una vez listo, llenar la botella con alpiste y atornillar el accesorio alimentador. Colgar el bebedero para pájaros en una rama y a disfrutar de las visitas que pronto llegarán a casa.