Muchos de los acontecimientos más memorables son recordados por medio de joyas confeccionadas con oro, las alianzas de casamiento, los primeros aretes de bebé y los collares de los 15; sin embargo, estos pueden mancharse con facilidad, por lo que existen consejos y trucos de limpieza que pueden ayudarnos.
Aunque existen variaciones dentro de este material, el oro amarillo es el que tiene mayor tendencia a tornarse oscuro; mientras que las piezas de oro rosa o blanco pueden perder su brillo, pero con estos trucos de limpieza ya no tendrás de qué preocuparte.
Tips para limpiar el oro y dejarlo reluciente como el primer día
Existe un truco de limpieza tan efectivo como económico, para conseguirlo simplemente necesitarás vinagre y bicarbonato. Nuevamente, estos componentes serán tu salvación para terminar con el oscurecimiento y la falta de brillo por igual.
Comienza mezclando dos cucharadas de agua por tres de bicarbonato, esto hará que formes una pasta maleable que colocarás sobre la pieza afectada.
Luego, sumérgela en un recipiente con una cantidad de vinagre blanco que permita que la joya se cubra por completo. Deja reposar por cinco minutos y procede a enjuagarla con agua tibia y un paño de microfibra suave.
Otros consejos que puedes utilizar
El clásico dúo del agua y el jabón puede convertirse en tu solución ideal, pero si lo prefieres, puedes utilizar detergente para platos. Sea cual sea tu elección, el procedimiento es el mismo.
Simplemente empapa tu joya con detergente o jabón y frota cuidadosamente con un cepillo de cerdas suaves.
Otro consejo súper eficiente es empapar tu pieza de oro con pasta de dientes y frotar con un cepillo de dientes o uno de cerdas suaves.