Con 14 años de edad, en 1954, Vicente Fernández inició su andadura profesional en la industria musical mientras trabajaba para ayudar económicamente a su familia. Su sueño era ser un cantante reconocido y pudo cumplirlo. A su lado siempre estuvo el gran amor de su vida, su esposa y madre de sus hijos, María del Refugio Abarca Villaseñor, apodada conocida como Cuquita.
La popularidad de "Chente" nació recién en la década de 1960, cuando pudo llegar a audiencias más grandes mediante la emisora de radio XEX-AM. Dos años después, grabó uno de sus primeros éxitos “Volver, volver” que pertenece al álbum "¡Arriba Huentitlán!”. En 1963, después de muchas idas y vueltas, contrajo matrimonio con Cuquita el 27 de diciembre. Su felicidad se completó con la llegada de sus descendientes: Vicente Jr., Gerardo, Alejandro y Alejandra, la hija de una hermana de Refugio a quien adoptaron.
Vicente Fernández siempre está presente para Cuquita
Vicente Fernández falleció el 12 de diciembre de 2021 a la edad de 81 años por una falla multiorgánica, derivada del síndrome de Guillain-Barré. A pesar de su desaparición física, su legado artístico aún se mantiene vigente, pero, de acuerdo con las declaraciones de Cuquita, aún no se fue del todo, sigue apareciendo en su rancho “Los Tres Potrillos” ubicado en Jalisco.
“Como tengo dos perritos chiquitos, ellos sienten la presencia y ladran en la madrugada”, aseguró recientemente a la prensa. Asimismo, reveló que su única reacción es comenzar a rezar. Cabe recordar que la tumba del legendario cantante está dentro del rancho, por lo tanto suele visitarlo con frecuencia: "Ahí lo tengo, voy a ir a verlo ahí en la tumba y lo van a ver todos, recordándolo bien bonito”.
No es la primera vez que Vicente Fernández aparece a sus seres queridos. A pocos meses de su deceso, su viuda confesó que sentía su presencia. "Increíble, pero se forma una cruz en mi cama, de verdad. Con la colcha, con todo, se forma una cruz a diario. Yo le digo que no se preocupe, que nadie ocupará su lugar".
Algo similar le ocurrió a su nieta, Camila Fernández, durante la grabación del videoclip “Aquí lo siento”. "Alguien tocó la puerta del balcón, pero cuando abrieron no había nadie". Para la hija de Alejandro Fernández, indudablemente, fue su abuelo que le estaba demostrando que siempre estará a su lado apoyándola y cuidándola.