Con el fallecimiento de Vicente Fernández aquel 12 de diciembre de 2021, México no solo perdió al “charro de Huentitán”, quien logró conquistar a todos los amantes de las rancheras durante la década de los 80, sino también al protagonista de una verdadera historia de amor, ya que su romance y posterior matrimonio con Cuquita parecían sacados de un cuento de hadas.
Desde temprana edad, don Chente tuvo en claro que quería ser un hombre exitoso dedicándose a la música, pero su camino a lo más alto de la fama no fue sencillo, pues antes de tocar el cielo con las manos debió aprender el verdadero significado de lo que es trabajar por su sueño, por este motivo él mismo aseguró: “Tuve muchos oficios y, lejos de avergonzarme, me llena de orgullo. Eso es lo que me hace ser como soy con los que me hacen el favor de trabajar conmigo”.
La confesión de Vicente Fernández sobre su vida amorosa que Cuquita no podrá olvidar
La vida de Vicente Fernández jamás fue sencilla y así lo comprobó cuando decidió lanzarse como cantante y muchas discográficas lo rechazaron, porque Javier Solís ya ocupaba su lugar como “El Rey de la Música Ranchera”, hasta que un golpe de suerte le permitió demostrar su talento y ser él quien consiga vender más de 60 millones de copias de sus discos en todo el mundo. Sin embargo, este camino a la fama no habría sido posible sin el apoyo incondicional de Cuquita.
La voz de Vicente Fernández se apagó, pero gracias a Cuquita su recuerdo sigue vivo en el imaginario social, por lo que don Chente no se equivocó cuando aseguró años atrás que María del Refugio Abarca era “su ángel de la guarda”, pues para él su esposa y madre de sus hijos era la responsable de su fortuna: “Cuca lo es todo en mi vida. Por ella soy quien soy”.
El cantante y Cuquita debieron superar varios obstáculos en el camino para estar juntos, pero finalmente en 1964 decidieron sellar su amor al dar el “¡sí, quiero!”. No obstante, pese a todo el amor que Vicente Fernández sentía por su mujer, no todo fue color de rosa entre ellos, tal y como él lo expresó a una importante revista, en donde confesó que cometió errores durante su matrimonio: “Yo no he sido ningún santo. Yo soy de los que dicen que más vale pedir perdón que permiso”.
La fama de galán nunca fue un problema para Cuquita, dado que para ella las aventuras del artista jamás significaron nada, sabía que la prioridad de Vicente Fernández era la familia que lograron formar en los últimos 60 años. Además, el intérprete de “Acá Entre Nos” aseguró en más de una ocasión que ahora se encontraba más enamorado de su esposa que cuando se casaron.