En el vaivén de la vida, los matrimonios a menudo se ven sacudidos por tempestades que amenazan con erosionar el lazo sagrado del amor y por ello nace una oración para prevenir estos momentos. La falta de comunicación, los cambios en la forma de amar y de relacionarse, así como la falta de respeto a los acuerdos establecidos, pueden conducir a la separación si no se abordan adecuadamente.
La oración existe como una poderosa herramienta espiritual que puede ayudar a fortalecer y proteger la unión matrimonial. En este contexto, la oración a San Gabriel emerge como un faro de esperanza y fortaleza para aquellos que buscan preservar y fortalecer el vínculo sagrado del matrimonio. San Gabriel, uno de los tres arcángeles más importantes del reino de Dios, es conocido por su poder milagroso y su capacidad para cumplir los deseos de aquellos que lo invocan con fe y devoción.
Especialmente en asuntos relacionados con la unión matrimonial, la familia y la pareja, San Gabriel es considerado un intercesor poderoso. Para realizar esta oración, es importante encontrar un espacio tranquilo y sereno. Enciende una vela roja y una blanca, símbolos de amor y pureza, y coloca un vaso con agua y una rosa roja, representando la pasión y el amor profundo. Luego, enciende las velas con un cerillo de madera y recita con fervor la siguiente oración a San Gabriel.
Oración poderosa a San Gabriel para la unión matrimonial:
“Oh glorioso Arcángel San Gabriel, llamado fortaleza de Dios, príncipe excelentísimo entre los espíritus angélicos, embajador del Altísimo, que mereciste ser escogido para anunciar a la Santísima Virgen la Encarnación del divino verbo en sus purísimas entrañas: yo te suplico tengas a bien rogar a Dios por mí, que protejas, que blindes mi matrimonio, que todo se base en el amor, en el respeto y la confianza, te imploro me concedas este deseo de tener a mi familia unida que si hay un descarrilado, que me lo pongas en el camino correcto para que venga a mi hogar, que mi pareja me siga amando como el primer momento. Amén”.
Dejas que se consuman las velas y al día siguiente tomas todo, lo envuelves en un trapo blanco y lo entierras en alguna maceta. No olvides repetir tes veces la oración, mientras imaginas lo bueno en tu matrimonio con tu pareja.