El baño es uno de los lugares que más se inclina a tener moho y sarro. Sucede que es una zona donde la humedad y las bacterias están al orden del día, por lo que requiere regularmente de un buen aseo. Para ello, te damos un par de consejos, o más bien trucos de limpieza, que servirán como un superaliado de la higiene para estos casos.
Una de las recomendaciones que tenemos para eliminar el sarro es el uso del vinagre blanco, un socio del aseo que, según la tiktoker @valbarrales, es un truco de limpieza ideal para el hogar.
Como podrás ver en el video, puedes empezar por el cabezal de la ducha, desmonta las piezas y sumérgela en una cubeta con vinagre blanco por dos horas. Al tiempo verás el resultado de este proceso.
En caso de que no tenga cuentes con un elemento que se desmonte, puedes hacer lo siguiente: utilizar una bolsa de plástico reforzada y llevarla a la propia regadera, amarrarla –sin que se salga el líquido— y dejarla en remojo.
Asimismo, puedes utilizar este producto en otras zonas del baño como los mosaicos. Incluso, puedes hacer una mezcla de vinagre blanco con bicarbonato de sodio para obtener una pasta y ponerla en áreas afectadas. La recomendación es dejarla actuar por más de 30 minutos para que haga efecto y así solo tengas que cepillar o limpiar y ver la magia hecha realidad.