El pan árabe siempre ocupa un lugar especial dentro de la gastronomía. Con su textura esponjosa y su versatilidad, esta delicia se ha convertido en un favorito, tanto para acompañar comidas principales como para preparar deliciosos sándwiches. ¿La mejor parte? Puedes prepararlo fácilmente en sartén, lo que hace de esta receta una opción rápida y sin complicaciones, perfecta para cualquier momento del día.
Ingredientes para la preparación de esta receta
-1 cucharadita de sal
-1 cucharadita de azúcar
-5 gramos de levadura seca
-1 cucharada de leche en polvo
-2 a 3 cucharadas generosas de aceite de oliva
-170 a 200 ml de agua tibia
-100 gramos de harina extra para estirar
- Preparación:
En un bol grande, combina la sal, el azúcar, la levadura seca y la leche en polvo. Mezcla bien para asegurar una distribución uniforme de todos los ingredientes.
Añade el aceite de oliva y el agua tibia a la mezcla seca. Es importante que el agua esté tibia, ya que esto ayudará a activar la levadura. Comienza con 170 ml y añade más si es necesario para obtener una masa suave y manejable.
Traslada la masa a una superficie enharinada y amasa durante aproximadamente 10 minutos, hasta que esté suave y elástica. Si la masa está muy pegajosa, añade un poco más de harina.
Coloca la masa en un bol ligeramente engrasado, cúbrela con un paño húmedo y déjala reposar en un lugar cálido durante 1 hora, o hasta que haya duplicado su tamaño.
Divide la masa en pequeñas porciones y forma bolas. Estira cada bola con un rodillo sobre una superficie enharinada hasta obtener discos finos.
Calienta una sartén a fuego medio-alto y cocina cada disco de masa durante 1-2 minutos por cada lado, o hasta que estén dorados y comiencen a hincharse.
Deja enfriar un poco antes de servir. Estos panes son perfectos para sándwiches o como acompañamiento de cualquier comida ligera.