Hay cientos de trucos de limpieza que hacen más sencillas las tareas del hogar, los cuales son super eficientes y lo mejor de todo es que son bastante económicos. Uno de los desafíos más notorios a la hora de limpiar nuestra casa es cuando nos enfrentamos a las ventanas, ya que no solo implica dejar los cristales impecables, sino también tenemos que poner énfasis en los rieles, perfiles, y hasta las rendijas más recónditas de esta abertura.
No obstante, en este artículo te revelaremos un truco de limpieza que compartió la cuenta de Instagram “Eli Orden y Limpieza” (@huele.a.limpio). Cabe indicar que esta usuaria se dedica a publicar técnicas y consejos para mantener el hogar siempre ordenado. Sin más vueltas te damos el paso a paso de este novedoso método para tener tus ventanas relucientes.
Materiales necesarios
- Un paño especial para cristales
- Una bayeta de microfibra
- Un desengrasante
- Un mini aspirador
- Un cubo de agua tibia
- Un cepillo de dientes viejo (ideal para zonas pequeñas).
Procedimiento:
Paso 1: lo primero que debes hacer para que este truco de limpieza sea un éxito es lavar los rieles, ya que es la zona que suele acumular más suciedad. La experta aconseja usar un mini aspirador sin cabezal para eliminar los residuos más grandes. Luego, humedece el cepillo de dientes con el desengrasante y friega las esquinas y los rincones del riel. Por último, pasar una bayeta húmeda para quitar los restos de desengrasante.
Paso 2: con los rieles ya limpios, es momento de encargarse del marco y las rejas (si tienes), donde usaremos una bayeta de microfibra y desengrasante. Recuerda debes enjuagar el paño en el cubo con agua tibia con frecuencia para quitar la suciedad que se vaya acumulando.
Paso 3: la experta asegura que para dejar los vidrios perfectos no hace falta invertir en costosos productos, ya que la clave yace en utilizar las herramientas adecuadas. Con una bayeta especial para cristales y un poco de agua, los cristales quedarán impecables con solo una pasada.
Paso 4: por último, limpiaremos las persianas, las cuales suelen acumular bastante suciedad. En una cubeta tienes que mezclar agua tibia con dos o tres pulverizaciones de desengrasante. Acto seguido, sube por completo las persianas y con una bayeta de microfibra empapada en la mezcla que hicimos, limpia cada lámina de la persiana y repasa con una bayeta limpia para un mejor acabado. Para las zonas difíciles de llegar, vuelve a usar el cepillo de dientes.