Cuidar el cabello durante la noche es fundamental para mantenerlo saludable y evitar daños. Durante el sueño, el cabello se encuentra en contacto constante con la almohada, lo que puede aumentar la fricción. La clave está en utilizar peinados que mantengan el pelo en su lugar sin tensión y que protejan su estructura.
Para cuidar el pelo durante la noche se debe adoptar pequeños cambios en la rutina que hacen una gran diferencia en la salud del cabello. Estos peinados nocturnos permiten que el cabello se mantenga en buen estado y que, al despertar, luzca listo para el día.
Peinados como el moño alto suelto y las trenzas ayudan a mantener el cabello controlado y a minimizar el contacto con la almohada, lo que disminuye la electricidad estática y el encrespamiento.
El moño alto y suelto es perfecto para cabellos largos. Mantener la melena recogida evita el roce constante con la almohada, reduciendo el frizz y protegiendo las puntas. Es importante no apretar demasiado el moño para que el cuero cabelludo no sufra tensión. La clave está en usar una goma sin partes metálicas que no maltrate el pelo.
Para quienes buscan unas ondas al estilo beach waves sin calor ni esfuerzo, la trenza suelta es la solución ideal. Este peinado, además de evitar los nudos nocturnos, crea ondas suaves y naturales. Para potenciar el efecto, por la mañana se deshace la trenza y se sacude el cabello ligeramente, sin cepillarlo para evitar el frizz.
El peinado de twists es ideal para cabellos rizados. Se realiza tomando dos mechones y enrollándolos entre sí, lo que evita los enredos y realza la forma natural de los rizos. Cuantos más twists se hagan, más definidos y marcados serán los rizos al despertar.