Las monedas mexicanas de baja denominación han captado la atención de los coleccionistas y se venden en plataformas en línea a precios sorprendentes, alcanzando hasta miles de pesos, a pesar de su bajo valor nominal. Este fenómeno no se debe ni a su material ni a su año de acuñación, sino a su rareza y atractivo en el mercado de numismática. Entre las más valoradas están las piezas de cinco, 10, 20 y 50 centavos, pertenecientes a las familias B, C y D, y emitidas en diversas fechas entre 1993 y 2009.
4 monedas de baja denominación que valen una fortuna
Moneda de 10 centavos de 2009
Este ejemplar, de la familia D, destaca por su composición de acero inoxidable. En su reverso, lleva grabado el número "10" acompañado del símbolo de centavos "¢" y el año de emisión, mientras que su anverso presenta el Escudo Nacional de México. En plataformas de comercio en línea, algunas personas han puesto esta moneda a la venta por hasta 10,000 pesos.
Moneda de 5 centavos de 1996
Con un diámetro de 15.5 mm, esta pecunia circular de la familia C fue acuñada con una aleación de acero inoxidable. Su diseño en el reverso incluye el número "5", el símbolo "¢" y el año de emisión. Este ejemplar de la moneda de 5 centavos de 1996, que se caracteriza por su simplicidad y valor histórico, se cotiza en algunos casos hasta en 13,000 pesos.
Moneda de 20 centavos de 1993
Este modelo dodecagonal de la familia B, fabricado en bronce-aluminio, es de los más buscados. En el reverso se muestra el número "20", el símbolo "¢" y una estilización del símbolo Acatl de la Piedra del Sol. En algunos sitios, se ha llegado a ofrecer por un precio de hasta 23,000 pesos, consolidándola como una joya para los apasionados de las monedas conmemorativas.
Moneda de 50 centavos de 1993
También dodecagonal y con un diseño en bronce-aluminio, esta moneda incluye el número "50" y una representación del Anillo de la Aceptación de la Piedra del Sol en el reverso. En la actualidad, algunos vendedores la valoran en hasta 24,000 pesos.