Hay una tendencia decorativa que vuelve con fuerza este invierno y es el maximalismo, el cual se diferencia de la conocida filosofía de “menos es más” que pregona el minimalismo, por la idea de que “más es más”. Esta es la rama del interiorismo que celebra la abundancia, el color y la mezcla de elementos diversos para crear espacios con color, textura y con patrones únicos.
El maximalismo se convierte en la opción ideal para quienes buscan un hogar vibrante para atravesar el invierno con color y personalidad. A continuación, te compartimos algunos tips para lograr una decoración maximalista y transformar el espacio que tú elijas en el centro de atención de tu hogar.
1. Colores intensos y contrastados: el maximalismo invita a jugar con una paleta de colores audaces, por lo que tonos intensos como azul, verde, rosa y rojo pueden convivir en un mismo espacio. La clave de este tipo de decoración es combinar estos colores de forma llamativa para lograr un efecto visual que cautive.
2. Patrones para todos los gustos: otro consejo importante para implementar este tipo de decoración es usar estampados florales, geométricos, animales y vegetales, los cuales pueden combinarse sin sobrecargar el lugar. Por ejemplo, las paredes, tapicerías, cojines y alfombras pueden convertirse en lienzos donde los patrones conviven y se entrelazan, creando un efecto visual muy dinámico.
3. Exceso, saturación y exuberancia: los espacios vacíos son los grandes enemigos del estilo maximalista, ya que la decoración recargada es la base de este tipo de diseños de interior. Cada rincón debe tener algún objeto como libros, esculturas, plantas, cuadros y piezas vintage que aportan personalidad a cualquier espacio de tu hogar.
4. Mezcla de épocas y estilos: el maximalismo te permite mezclar distintos tipos de estilos y épocas, ya que pueden coexistir junto a piezas clásicas o retro, creando un ambiente con tu toque personal. La combinación de elementos vanguardistas y vintage en muebles, objetos y arte da lugar a espacios con carácter único.