A la hora de elegir una manicura que nos acompañe en nuestras obligaciones diarias, como el trabajo y/o el estudio, cada una de sus características importa, pues estas nos guiarán hacia la técnica perfecta para nuestro nail art. En esta ocasión, pondremos sobre la mesa las uñas de gel y las uñas de porcelana.
Estas dos técnicas tienen mucho que darnos, sin embargo, es en las diferencias de cada una que podremos elegir con más precisión cuál es la que realmente necesitamos para lucir un nail art que se adapte a nuestras exigencias.
Uñas de porcelana
Te podría interesar
Las uñas de porcelana son elaboradas con fibra de vidrio; este material, aunque parezca frágil, logra un aspecto sofisticado en el nail art final. Su aplicación requiere cuidado y es realizada por profesionales en centros especializados. El proceso implica dar forma y tamaño adaptados a las uñas naturales.
Uñas de gel
Contrastando con las de porcelana, las uñas de gel se crean con oligómeros viscosos. Estos se endurecen bajo lámparas ultravioleta; aunque se adhieren a la uña natural, la falta de moldeado puede afectar la adaptación y la estética final. A pesar de ello, las uñas de gel están en tendencia y son más asequibles que las de porcelana.
Principales diferencias para considerar
- Dureza: las uñas de porcelana son más duras y resistentes a golpes, pero su rigidez podría dañar la uña natural si se rompen. Las de gel son más flexibles.
- Color y grosor: las uñas de gel tienden a tener un aspecto más natural si no se aplica esmalte; las de porcelana suelen ser más opacas. El grosor de las uñas de gel es notoriamente mayor debido a la aplicación de varias capas durante la manicura.
- Duración y mantenimiento: las uñas de porcelana suelen durar aproximadamente seis meses, pero las de gel tienen una duración menor. Ambas requieren mantenimiento cada quince días.
- Eliminación: las uñas de porcelana se quitan con un líquido especial, mientras que las de gel requieren un quitaesmalte específico y limado de la uña.
- Costo: las uñas de gel son más económicas que las de porcelana; esto siempre es un factor importante a considerar.