Aunque te esmeres en la limpieza de tu hogar, es posible que pases por alto algunos objetos que acumulan polvo y suciedad con el tiempo. Estos elementos, cuando se descuidan, pueden convertirse en focos de alergias y malestares. Para evitarlo, es crucial reconocerlos y recordar limpiarlos con mayor frecuencia.
Hay algunos objetos comunes del hogar que a menudo se olvidan al momento de la limpieza, pero que merecen tu atención para mantener un ambiente más saludable.
1. Rodapiés o zócalos:
Estos elementos, a menudo pasados por alto, protegen las paredes de golpes, pero también necesitan cuidado. Acumulan polvo y motas, y aunque no requieren limpieza diaria, es recomendable hacerlo cada dos o tres semanas, especialmente si hay personas con alergias en casa.
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2. Interruptores de energía:
Dada la cantidad de bacterias en nuestras manos, los interruptores de energía pueden convertirse en caldo de cultivo para microorganismos. Aunque se tocan constantemente, a menudo se olvidan en la limpieza diaria. Incluirlos en la rutina garantizará una desinfección más efectiva.
3. Marcos de ventanas:
Aunque nos esforzamos por tener cristales limpios, los marcos de las ventanas a menudo se pasan por alto. Estos acumulan polvo, smog y humedad, especialmente en la cara exterior. Limpiarlos de manera regular, aunque no diaria, es esencial para mantener un entorno más saludable.
4. Relleno de almohadas:
Mientras lavamos las fundas de las almohadas, el relleno también acumula sudor, polvo, bacterias y ácaros. Aunque puede ser complicado limpiarlo, seguir las indicaciones del fabricante asegurará una limpieza segura y efectiva.
5. Rieles de armarios:
Al estar cerca del suelo, los rieles de los armarios acumulan polvo y motas. A menudo se limpian superficialmente, pero dedicar tiempo exclusivo a asearlos a fondo mejorará la calidad del aire en casa.
6. Escoba y recogedor:
A pesar de ser esenciales para la limpieza, la escoba y el recogedor a menudo se guardan sin limpiar. Limpiarlos a fondo una vez por semana evitará que se conviertan en fuentes de polvo.
7. Cubos de la basura:
Aunque se les coloquen bolsas, los cubos de la basura pueden acumular bacterias y olores desagradables. Límpialos a fondo para evitar malos olores permanentes.
8. Rejillas de ventilación y radiadores:
Estas estructuras acumulan polvo y grasa, afectando la calidad del aire en casa. Además de asear la cara exterior, una limpieza mensual más profunda asegurará un ambiente más saludable.
9. Alcachofa de la ducha:
A menudo olvidada debido a su altura, la alcachofa de la ducha acumula polvo y grasa en su exterior. Limpiarla al menos una vez al mes garantizará un baño más higiénico.