Sin lugar a dudas, una de las bebidas más consumidas en todo el mundo, y que rara vez escasea en los hogares, es el café, el cual puede alternarse con otros ingredientes como endulzantes, azúcar, leche, crema y muchísimas otras alternativas.
Si bien en los últimos años mucho se ha hablado en torno al consumo diario de café y los posibles riesgos que podría traer a nuestra salud, con el paso del tiempo también se dieron a conocer cada vez más beneficios al ingerirlo con frecuencia.
Al respecto, el doctor Fernando Fernández Bueno explica que lo ideal es consumir esta bebida de forma diaria en no más de 550 miligramos, es decir, entre tres y cinco tazas de tamaño normal.
Además de estar compuesto por cafeína, el café posee también vitaminas del grupo B, magnesio, potasio y así también lignanos, ácido clorogénico y ácido ferúlico, según detalla “El Mundo”.
Como si todo ello fuera poco, el consumo diario de café en las cantidades indicadas, y de acuerdo a lo señalado por el farmacéutico Sento Segarra, influye significativamente en la reducción de posibilidades de padecer enfermedades como el Parkinson, la Demencia y el Alzheimer.
Asimismo, el consumo de esta bebida a base de cafeína genera un efecto antiinflamatorio, lo que resulta sumamente beneficioso para ciertas enfermedades como pueden ser la tendinitis y la artritis.
Finalmente, debes saber que el consumo diario de café disminuye de manera considerable el riesgo de muerte, y previene el síndrome metabólico, es decir, afecciones como la resistencia a la insulina, la presión arterial elevada y la acumulación de grasa abdominal, entre muchos otros beneficios.
Ahora que conoces algunos de los tantos aspectos positivos de beber a diario al menos una taza de café, es momento de preparar esta exquisita bebida y disfrutarla, sin importar de qué momento del día se trate.