Mantener verdes y sanas tus plantas implica tiempo y dedicación, además de un riego responsable. A continuación te enseñamos una guía sencilla para hidratar la vegetación de tu casa efectivamente.
Gracias al riego responsable en cada una de las plantas que posees en el jardín o en el interior de tu hogar, conseguirás que ninguna de las especies verdes a tu cargo se ahogue o sufra sequía. En ese sentido, debemos resaltar que la hidratación es fundamental, pues es el agua la que permite llevar a cabo las funciones vitales de los cultivos.
Para que las plantas puedan realizar la fotosíntesis y generen nutrientes, esquiven enfermedades o eviten secarse hasta morir, debe lograrse un riego adecuado. Por ello se sugiere que quien esté a cargo del cuidado de las especies verdes conozca muy bien cada ejemplar plantado en su territorio para así saber cada cuánto hidratarlas y qué sistema de riego es el mejor. Aquí también entra en juego la observación como método práctico, ya que, a partir de ello, se podrá conocer cómo debe estar la tierra para el desarrollo ideal y la supervivencia del vegetal.
Sin una buena observación de las plantas, el riego suele darse erróneamente sin otorgar la cantidad de agua necesaria en el momento adecuado y comienzan a aparecer manchas en las hojas, caídas de pétalos o a secarse ciertas partes de una planta. Los expertos indican que la ocasión ideal del día para regar es temprano en la mañana o a la hora del atardecer, es decir, cuando hay temperaturas frescas.
El riego saludable para plantas también puede realizarse con agua de lluvia recolectada. De esa manera, no solo le haremos bien a las plantas, sino al medio ambiente, ya que se aplicará un método sostenible y barato para el bolsillo.