Un hogar limpio siempre es sinónimo de un lugar sano en el que pasar nuestras horas y asegurarnos no solo nuestro bienestar, sino también el de nuestra familia. Una correcta limpieza en la casa nos brinda la más agradable sensación, pero así también reduce al máximo posible la posibilidad de contraer ciertas enfermedades.
Para muchas personas, los desagües suelen representar un dolor de cabeza, dado que, muchas veces, se tapan, y además suelen desprender un olor bastante desagradable debido a la acumulación allí de ciertos residuos.
Por todo ello, aquí queremos enseñarte un truco sencillo para limpiar este conducto sin la necesidad de solicitar la ayuda de un plomero o gastar una verdadera fortuna en soluciones químicas o productos para esta problemática.
Para limpiar nuestros desagües tanto en la cocina como en el baño, podemos crear un método sencillo e infalible a partir de la mezcla de tres ingredientes de lo más comunes: agua hirviendo, bicarbonato de sodio y vinagre.
Mientras que el bicarbonato de sodio y el vinagre en conjunto causan una reacción química que luego genera el dióxido de carbono que permitirá deshacerte del atasco en los desagües, el agua hirviendo descompone y facilita la eliminación de todo residuo que haya quedado allí.
En primer lugar, elimina de la superficie del drenaje de fontanería ya sea de tu cocina o tu baño todo resto de basura, suciedad, pelos o cualquier otro desecho que lo esté bloqueando. Luego, coloca allí una taza de bicarbonato de sodio.
Posteriormente, aplica sobre tus desagües y de forma paulatina una taza de vinagre. Tapa la salida y aguarda por un total de 30 minutos y hasta una hora a que la mezcla genere el efecto deseado.
Como último paso, coloca sobre tus desagües una olla con agua hirviendo, para eliminar de este modo todo tipo de residuos que aún podrían continuar en la zona. ¡Y listo! Así de fácil podrás destapar tus desagües y dejarlos libres de suciedad.